Retomando el blog

Siento que en estos últimos cinco años he dejado muchas cosas de lado, entre ellas escribir. El 31 de Julio del 2019 dejé mi trabajo para dedicarme a mi pequeña empresa a tiempo completo. Es como cuando uno se despierta y mira alrededor a tratar de reconocer el lugar donde uno está. Hey, qué pasó, porqué dejé algunos de los voluntariados que me gustaban, por qué dejé mi lado creativo arrimado en un rincón? Aunque dedicarse a la contabilidad y a hacer impuestos suene aburrido, a mí me encanta. Recuerdo que una vez en una Misa de Gallo en St. Anthony of Padua, el párroco, Father Tom, nos contó en la homilía que su padre era CPA, y que lo que más disfrutaba era el contacto y la relación con sus clientes. Uno llega a conocer a personas que realizan todo tipo de actividades, y a tratar de ayudarles con los asuntos de sus pequeños negocios. Son tan diferentes entre ellos, y uno va aprendiendo con cada experiencia. A algunos les va muy bien, otros no tanto y tienen que cerrarlos. Un cliente me decía que se sentía aliviado después de haber dejado esa aventura. Igual es un gusto conocerlos, a veces sólo por teléfono o Whatsapp, pero cada uno es un mundo y con cada cliente uno aprende. Hace poco mi mamá me pidió que pusiera el relato de los recuerdos de Bahía en Facebook, y creo que los comentarios positivos me han animado a escribir de nuevo. Tengo algunas cosas que contar, así que espero sea un nuevo comenzar. Seguir leyendo el artículo